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En un archivo fílmico profesional, los materiales con diferentes grados de deterioro químico son separados de los materiales “sanos”.  Si estos materiales no son copias únicas o especímenes raros,  su destino es ser destruidos para evitar “contagios”. Mientras llega este momento, las películas esperan en una bodega/limbo. Tuvimos la suerte de rescatar una serie de películas de origen chino de uno de estos limbos. Encontramos documentales, animaciones, ficciones, propaganda gubernamental que dan cuenta, por un lado, de la cultura del país de origen en una época que va de los años 70 a los 90; y por otro, conforman un catálogo del deterioro físico del material fílmico.  Tomando como materia prima estas imágenes y sonidos, haremos una proyección/collage utilizando simultáneamente 6 proyectores de 16mm y sonorización en tiempo real para hacer una reflexión sobre el archivo y su problemática.

Primer Encuentro Internacional de Archivistas Audiovisuales de Oaxaca (2014)

*extractos de la relatoría elaborada por Tzutzumatzin Cortés

Preguntas que cuestionan el estatuto de los archivos y la jerarquía de los conocimientos, que reencuadran la idea de autor y la apropiación del video como soporte para preservar tradiciones ancestrales. Urgencia de resguardar el video condenado a una desaparición inminente por decreto de la obsolescencia tecnológica. El I Encuentro Internacional de Archivistas Audiovisuales organizado

por OaxacaCine reunió, a lo largo de cuatro días, a un interesante grupo de curiosos, aficionados, cinéfilos, activistas, artistas, cineastas, archivistas, investigadores y técnicos (casi todos en múltiples combinaciones) para hablar de estos temas y vislumbrar caminos para la preservación y la creación de archivos audiovisuales comunitarios.

 

En este primer encuentro, el LEC colaboró de varias maneras, por un lado, se aportó el equipo para armar unidad de transferencia, bajo la asesoría de Walter Forsberg, del Smithsonian Institute. Esta idea nació de un proyecto implementado en el New Museum Of Contemporary Arts de Nueva York, donde en 10 semanas se digitalizaron más de 300 horas de video, en un actividad performativa donde cualquier persona podía llegar con sus casetes, desde películas hasta grabaciones caseras de todo tipo. Un experimento que, dice Forsberg, permite “desmitificar la tecnología”.

La versión oaxaqueña de la unidad de transferencia demostró su poder tecnológico y semántico. Una maraña de cables y una mesa repleta de aparatos, cual laboratorio de película del Santo, que sirvió para explicar cómo funciona la tecnología obsoleta en su diálogo con una Mac. Decenas de casetes transferidos, entre ellos un bautizo escondido en una cinta medio achicharrada por el tiempo que permitió a una madre reencontrarse con su memoria 22 años después. Ese rostro emocionado ante el hallazgo revela en un instante el carácter demiúrgico del cine y clarifica el sentido de

un archivo.

 

El LEC también participó en las ponencias que se llevaron a cabo durante la semana y estuvo a cargo de la función de clausura del encuentro, en la que se utilizaron proyectores de diversos formatos para ver películas caseras aportadas por el público y se realizó un cine performance en colaboración con artistas de Oaxaca.

Vistas Oaxaqueñas

La vida cotidiana en Oaxaca es registrada todos los días por locales y visitantes utilizando cámaras de video digitales cada vez más pequeñas, portátiles y accesibles. Estas imágenes a veces quedan archivadas sin ser compartidas y es muy fácil que se pierdan por fallas técnicas en los aparatos o simplemente porque nos vemos obligados a borrar archivos para liberar espacio de memoria y, de esta manera, estamos perdiendo la oportunidad de generar una historia visual contada por nosotros mismos.

El proyecto VISTAS OAXAQUEÑAS es una invitación a compartir archivos de video grabados en Oaxaca con la idea de crear una memoria visual a partir de un punto de vista colectivo.  Los videos compartidos se muestran en la página web del proyecto y se itineran por las calles utilizando un carrito parecido a los que utilizan los vendedores de paletas: los paseantes pueden asomarse al interior del carrito para ver los videos. El dispositivo se hizo pensando en los peep-shows donde se mostraban escenas cotidianas en los inicios del cine.

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